Necesitamos desarrollar unos procesos de planificación de los asentamientos para refugiados que no solo la faciliten a largo plazo sino que también permitan cada vez más mejoras. El caso de M'Bera en Mauritania lo ilustra.
Las actuales directrices humanitarias no abarcan suficientemente lo que implica el alojamiento en entornos de conflicto inestables y prolongados, en especial fuera de los campos organizados. Proponemos unas herramientas mejoradas para llenar esas lagunas.
Cuando se les desafió a investigar opciones de alojamiento para los refugiados en su ciudad, los estudiantes de arquitectura descubrieron que existen respuestas arquitectónicas sencillas y plausibles para la integración de los refugiados en las ciudades europeas de tamaño medio como A Coruña.
La mayoría de las familias que se recuperan de una catástrofe por culpa de un desastre reconstruyen sus propias casas. Esta práctica de autorrecuperación por parte de las comunidades no desplazadas puede servir también para las poblaciones desplazadas.
Las inundaciones en 2010 afectaron a 18 millones de personas en Pakistán. Con la disminución de los fondos por parte de los donantes e inundaciones recurrentes en 2011 y 2012, la comunidad humanitaria requería soluciones de bajo costo que pudieran ampliarse para satisfacer tanto las necesidades inmediatas como las necesidades transitorias de grandes poblaciones en diferentes zonas geográficas.
Las formas arquitectónicas de los alojamientos de emergencia y el modo en que se crean desempeñan un papel importante en la capacidad de sus habitantes para sobrellevar el desplazamiento y tal vez sentirse, al menos temporalmente, en su hogar.
Las llegadas masivas a Grecia desde 2015 han superado con creces la provisión de alojamiento aceptable. Los intentos para ofrecer soluciones continúan.
Nuestro departamento de investigación y desarrollo ha estado trabajando en una solución de alojamiento con los requisitos de mejorar la logística, el montaje, la flexibilidad, el aprovechamiento de los recursos naturales y, sobre todo, la mejora de las condiciones de habitabilidad. Finalmente volvimos a sistemas de arquitectura más tradicional, combinándolos con materiales tecnológicos avanzados.
Los promotores de la Dependencia de Alojamiento de Refugiados conocen todos los aspectos y componentes de sus diseños pero nunca podrán saber lo que es despertarse en uno de ellos día tras día. Del mismo modo, el usuario final carece de las herramientas o recursos para hacer cambios globales a su diseño. La cuestión es cómo trabajar juntos en ello.
Ofrecer a los futuros residentes de los alojamientos la posibilidad de elegir el estilo de la construcción y dejarles que participen en su construcción sirve para empoderarles y para que desarrollen sus aptitudes.
La protección especial para los refugiados y las personas desplazadas debería formar parte de las políticas de vivienda de los países.
Durante los últimos veinte años, la provisión de alojamiento por parte del Gobierno para la población migrante de Calais ha priorizado la afirmación de la autoridad estatal por sobre la reducción del sufrimiento humano. Las políticas en 2015-2016, que implicaron la destrucción de alojamientos informales y el suministro de alojamiento alternativo básico, continuaron esta tendencia.
¿Era lo que se construyó en La Linière, en la localidad de Grand-Synthe (en el norte de Francia), un campo de refugiados tradicional o un nuevo tipo de distrito urbano?
A medida que las ciudades europeas siguen seleccionando edificios que ya existen para utilizarlos como alojamiento para refugiados, se hacen evidentes los retos que las idiosincrasias espaciales de estas estructuras presentan para las autoridades que seleccionan los emplazamientos y para quienes deben residir en ellos.
Las actividades cotidianas de los residentes y voluntarios del centro de alojamiento para los refugiados City Plaza Refugee Accomodation Centre de Atenas y la organización del espacio contribuyen a crear una sensación positiva de “hogar”.
Un viejo edificio por el que durante muchos años han pasado personas desplazadas está siendo utilizado por el último grupo de recién llegados, esta vez de fuera de Europa.
No se ha prestado suficiente atención al diseño de los alojamientos y asentamientos en los campamentos de refugiados en situaciones prolongadas en el este de África. Sin que nos demos cuenta, los resultados obstaculizan el desarrollo de los niños pequeños.
Un buen programa de alojamiento debe incluir medidas paliativas a través del ciclo del proyecto para reducir los riesgos de violencia de género.
Al incorporar iniciativas de agricultura urbana en los entornos de los campos de refugiados se puede ampliar el concepto de alojamiento para incluir la protección contra el clima, abordar las deficiencias nutricionales y aumentar los niveles de dignidad humana, creación de espacios y autosuficiencia.
En Ucrania se están rehabilitando edificios para ofrecer alojamiento a las personas que huyen del conflicto en el país pero, a medida que la guerra continúe, se deberá reconocer la necesidad de soluciones más permanentes.
Para entender la idea de alojamiento en situaciones de desplazamiento y de retorno, se deben considerar las dimensiones tanto materiales como no materiales. Además de emprender movimientos en entornos geográficos específicos, los desplazados internos y los repatriados se mueven en espacios sociales.
El nuevo asentamiento de Kalobeyei se centra en la creación de una planificación territorial para guiar el asentamiento tanto a corto como a largo plazo por el bien de ambas comunidades, la de acogida y la refugiada.
Al menos una aldea de Albania preferiría no repetir la experiencia de acoger a kosovares desplazados.
Que una familia autóctona acoja a una familia desplazada en su hogar se está convirtiendo en una forma muy habitual de alojamiento durante el desplazamiento. Entender cómo experimentan la acogida las personas desplazadas y quienes les acogen puede ayudar a los Gobiernos y a las agencias humanitarias a diseñar actividades que favorezcan el éxito y sostenibilidad de sus programas.
El abordaje de la falta de tenencia segura y del riesgo de desahucios forzados es una de las características que definen la respuesta basada en el alojamiento urbano.
Cada año, alrededor de medio millón de personas busca alojamiento en Daca, a causa del nexo entre el cambio climático, la pobreza y la degradación del medio ambiente. Muchas de estas personas terminan viviendo en las calles.
Los refugios masivos no parecen ser una solución de alojamiento adecuada ni siquiera durante el repentino estallido de una crisis, ya que provocan problemas de dignidad y seguridad y conllevan graves consecuencias para la salud.
Quienes trabajan en los organismos de ayuda internacional en el desarrollo de soluciones de alojamiento para las poblaciones desplazadas pueden aprender mucho de las prácticas de diseño centradas en los seres humanos empleadas por los arquitectos y planificadores profesionales.
En ocasiones los trabajadores humanitarios y los arquitectos no logran encontrar un lenguaje común, que caracterice a cada uno en términos esquemáticos. Es hora de tender un puente entre estas profesiones y fomentar una mayor colaboración. Al aprender de la manera de pensar del otro, pueden también adaptarse mejor a las personas desplazadas en busca de alojamiento.
Las transferencias de dinero en efectivo pueden ser una herramienta poderosa en situaciones de conflicto y de migración forzada. Sin embargo, es de gran importancia que se destaque la necesidad de adoptar un enfoque que tenga en cuenta el contexto y el conflicto.
La pérdida de la esperanza a lo largo del tiempo ha causado desesperación y una crisis de salud mental en los refugiados y los solicitantes de asilo en la isla Manus y Nauru. El uso del principio de "esperanza razonable", sin embargo, puede apoyar su salud mental y bienestar.
Los refugiados con discapacidades de comunicación son particularmente vulnerables a la violencia sexual y de género, en parte debido a su limitada capacidad para denunciar los abusos.
En su determinación por tomar el control de un futuro incierto, los refugiados de Sri Lanka que viven en los campamentos de Tamil Nadu, India, le han dado prioridad a la educación. La historia de cómo lo hicieron, y el papel crucial del gobierno de acogida para apoyarlos, pueden inspirar a otras comunidades de refugiados que esperan en la incertidumbre una solución duradera.
Es necesario simplificar el proceso de inscripción del nacimiento en el registro para los hijos nacidos a raíz de una violación —especialmente en el caso de mujeres refugiadas— para evitar la apatridia.
Una nueva investigación revela que los errores de los trabajadores sociales del Ministerio del Interior con respecto al manejo de pruebas periciales médicas de tortura pueden hacer que sea prácticamente imposible que los supervivientes de tortura que buscan asilo en el Reino Unido demuestren que fueron torturados. Las consecuencias pueden ser devastadoras para las personas afectadas y también pueden suponer una carga adicional para los servicios públicos y los fondos.
Las mujeres embarazadas refugiadas en ruta por Europa tienen que dar a luz en condiciones extremadamente difíciles. Se enfrentan a elecciones terribles, y sus bebés corren el riesgo de ser apátridas.