No regresar a casa: juventud desplazada tras la guerra

Al prepararnos para una República Democrática del Congo postconflicto deberíamos ser más conscientes de las aspiraciones de los jóvenes, de las oportunidades que tienen abiertas y los retos a los que se enfrentan para construir una vida decente.

Los programas de intervención actuales en la República Democrática del Congo (RDC) rara vez se centran en la "juventud" como subcategoría social, sino que más bien tienden a estar dirigidas a niños y niñas o niños/as soldados como grupos prioritarios. Este hecho resulta sorprendente dado el actual enfoque de "abundancia de jóvenes" en África y el riesgo de creer que esa juventud suponga el estallido y la reemergencia de los conflictos violentos. Además de esta negativa imagen estereotipada, se están llevando a cabo muy pocos estudios sobre el empleo juvenil y sus oportunidades de conseguir una vida mejor en las postrimerías de la guerra. 

El presente artículo bosqueja los hallazgos realizados durante un estudio llevado a cabo en 2008, sobre el modo de ganarse la vida de jóvenes desplazados (no armados) asentados en la ciudad de Butembo o en sus alrededores, al este de la RDC. 1 Como en otros contextos urbanos africanos, es de esperar que los jóvenes afectados por la guerra se enfrenten a graves problemas de pobreza y marginación en el este de la RDC a causa del trabajo precario y mal pagado, lo que podría decirse que les hace más vulnerables a la actividad criminal  y al reclutamiento por parte de grupos armados. En general, este estudio confirma su vulnerabilidad, con aproximadamente un tercio de ellos (28,6%) obligados a encontrar un segundo empleo -principalmente en la venta ambulante (41,6%) o en la agricultura (29,7%)- para complementar sus ingresos diarios. Estos jóvenes desplazados se dedican principalmente a la agricultura (27,5%) como primer empleo, a la venta ambulante (11%) o al sector del transporte (6,8%); en la periferia rural estos porcentajes alcanzan el 70% en la agricultura y al 12,5% en el comercio y el transporte. Esto constituye un punto de partida importante desde la perspectiva de sus anteriores vidas, ya que casi la mitad de los jóvenes (52%) trabajaba antes como granjeros y todos proceden de medios rurales. La mayoría (98%) abandonó su hogar por culpa de los combates y los problemas de seguridad.

Hubo dos observaciones en concreto que parecía interesante explorar. La primera se refiere a las aspiraciones de estos jóvenes de construir su propio hogar. Al contrario de lo que se cree, la mayoría de los jóvenes desplazados no quieren volver a sus hogares parentales o al ambiente rural cuando la seguridad lo permita, sino que prefieren un trabajo en la ciudad, ya sea en el comercio y los servicios (aproximadamente el 40%), la enseñanza y otros tipos de trabajo intelectual (17%), trabajos artesanales (10%) o administrativos (10%). Sus comentarios sobre el ambiente socioeconómico favorable de la ciudad y su potencial acceso al trabajo y a los recursos sugieren un cambio fundamental de identidad entre estos jóvenes, que ahora se consideran urbanos y desvinculados de sus orígenes rurales. Al noroeste de la RDC la combinación entre las consecuencias de la guerra, el subdesarrollo del medio rural y la marginación social ha estimulado una creciente urbanización entre los jóvenes migrantes y la adopción de estilos de vida "modernos"; reflejando la tendencia predominante en el conjunto global del continente africano. 2

La segunda observación que puede realizarse con respecto a estos jóvenes es el acceso a un trabajo decente. Mientras que la ciudad, en teoría, ofrece un sinfín de empleos y oportunidades, los jóvenes desplazados suelen encontrarse en los márgenes de un mercado laboral urbano todavía delimitado por las marcadas divisiones sociales. Un considerable segmento de jóvenes desplazados de Butembo se ve obligado a asegurarse unos ingresos diarios mediante la venta ambulante y los trabajos temporales, o lo que los habitantes de la ciudad llaman bikakala (en la oferta y la demanda). Estos trabajos diarios pueden consistir en cualquier cosa: excavar para hacer aseos, prensar piedras y transportar arena (normalmente desempeñado por hombres), vender aperitivos, plátanos y aracque (una bebida alcohólica de maíz) en el arcén de la carretera (un trabajo mayoritariamente femenino), cargar camiones o conducir las tradicionales bicicletas de reparto de madera (chukudu) por las polvorientas calles de Butembo. Más que en una lujosa vida llena de oportunidades en la ciudad, muchos jóvenes parecen atrapados en una lucha diaria definida por un alto grado de incertidumbre e imprevisibilidad.

Parte de este sufrimiento diario puede estar ligado, por supuesto, a su frágil contexto social. Aunque la mayoría de los desplazados en el este de la RDC parecen vivir con familias de acogida, los jóvenes desplazados sólo suelen recibir ayuda parcial en términos de alimentos y alojamiento y casi nunca en cuestiones de tasas escolares, cuidados médicos o ropa. Tal vez sería útil reexaminar el término "familias de acogida", puesto que apenas recoge la naturaleza dispersa de los hogares congoleños y el modo en que los desplazados se aseguran la comida y el alojamiento. Un patrón más frecuente entre los jóvenes desplazados es de hecho la migración circular entre su hogar (rural) original y su nuevo hogar urbano, constituyendo este último su lugar de residencia principal.

Una mirada más profunda en los mecanismos de la economía monetaria de Butembo sugiere que el acceso de los jóvenes a unos ingresos sostenibles no puede reducirse a un simple problema de capital social, sino que más bien está siendo dirigido por un mercado laboral de carácter explotador. El acceso al trabajo y al comercio en Butembo continúa en manos de un círculo cerrado de comerciantes de importación-exportación, algunos de los cuales tienen un gran interés en  las economías regionales surgidas de los conflictos. 3 Un cártel local (conocido en la zona como el "G8") está formado por una serie de negocios familiares que controla la cadena de importación/exportación desde pequeños mercados agrícolas, a la frontera con Uganda, donde las mercancías llegan desde Kenia y el Lejano Oriente. El que la mayoría de estos negocios estén organizados sobre la base del mercado familiar hace que resulte muy difícil para los extraños conseguir un empleo en este "segundo" sector económico; habiéndose desplomado hace años el primero -administración y servicios- bajo la dictadura de Mobutu. El resultado inmediato de esto es que los trabajos comerciales más regulares, como contable o tendero, sean confinados a un reducido círculo de parientes alrededor de esas familias del "G8". Los jóvenes inmigrantes suelen referirse a este mecanismo como "tribalismo".

Implicaciones

De esa situación podrían extraerse dos conclusiones. A nivel práctico, los programas de apoyo a los desplazados en la RDC podrían servir para resaltar las oportunidades de trabajo y las ambiciones de los jóvenes migrantes. A menudo se han destinado las intervenciones a cuestiones de desarrollo de la infancia o a niños y niñas soldados, sin tener en cuenta el gran número de jóvenes pacíficos que intentan ganarse la vida decentemente. Desde hace algún tiempo la tendencia predominante ha sido representar a la juventud de las zonas urbanas de África como una bomba de relojería, pero es probable que una parte del problema esté en la perpetuación de una visión de la juventud urbana africana marcada como "marginados sociales alienados" 4 y carentes de resiliencia social.

En lugar de dar por sentado la base económica de los hogares y los métodos de supervivencia, en futuros estudios debería tomarse en serio la naturaleza inherentemente política de los mercados económicos (informales) y el significado cotidiano que la gente atribuye a las nociones de acceso a los medios de subsistencia, el poder (su falta) y la vulnerabilidad. Como parecen sugerir las historias de los jóvenes desplazados de Butembo, tales significados reflejan los imaginarios y las ambiciones sobre una posible vida fuera de la marginalidad pero dentro de una sociedad a menudo cerrada y proteccionista.

Timothy Raeymaekers (Timothy.Raeymaekers@geo.uzh.ch) es profesor del Departamento de Geografía de la Universidad de Zúrich.

Gracias a mi equipo de investigación congoleño (bajo la supervisión del doctor Meni Malikwisha), a mis estudiantes de máster (especialmente a Lennart Vandamme y a Lies Sacré), a la Comisión Europea y a MICROCON.

1 Con una muestra formada por 348 jóvenes autoasentados (190 desplazados y 158 desplazadas) divididos, más o menos de manera equivalente, entre la ciudad de Butembo y su periferia urbana (Bunyuka) y con edades comprendidas entre los 15 y los 36 años (la mayoría  entre 18 y 26 años).

2 Véase RMF 34 "Adaptarse al desplazamiento urbano", http://www.migracionesforzadas.org/desplazamiento-urbano.htm

3 Véase Raeymaekers, T (2002) "Network War. An Introduction to Congo ’s Privatised War Economy’ (“Guerra de redes. Una introducción a la privatización de la economía de guerra del Congo”), Novib, Den Haag: http://www.ipisresearch.be/download.php?id=60 y (2010) ‘Protection for Sale? War and the transformation of regulation on the Congo-Ugandan border’ ("¿Proteción a la venta? La guerra y la transformación de la regulación de la frontera Congo-Uganda"): Development and Change , julio (41/4), http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/dech.2010.41.issue-4/issuetoc

4 Véase Sommers, M (2003) ‘Youth, wars, and urban Africa: challenges, misunderstanding, and opportunities’ ("Juventud, guerras y el África urbana: retos, desacuerdos y oportunidades") en Ruble, B A et al, eds Youth explosion in developing world cities: approaches to reducing poverty and conflict in an urban age (La explosión de la juventud en el desarrollo de las ciudades del mundo: un enfoque para reducir la pobreza y los conflictos en una era urbana), Woodrow Wilson International Center for Scholars, Washington DC, pp25-46; http://www.wilsoncenter.org/topics/pubs/ACF1AEF.pdf

 

 

 

Renuncia de responsabilidad
Las opiniones vertidas en los artículos de RMF no reflejan necesariamente la opinión de los editores o del RSC.
Derecho de copia
Cualquier material de RMF impreso o disponible en línea puede ser reproducido libremente, siempre y cuando se cite la fuente y la página web. Véase www.fmreview.org/es/derechos-de-autor para más detalles.